jueves, 26 de abril de 2012

Las ardillas

Es un roedor generalmente poco cariñoso, porque todavía está bastante asilvestrado. Las ardillas silvestres autóctonas de nuestros bosques están protegidas y no se pueden tener en casa. Las que encontramos en las tiendas de animales están permitidas y criadas en cautividad.
En condiciones ambientales viven en madrigueras excavadas en el suelo, donde acumulan ordenadamente cantidades  de  alimentos secos para el invierno. El tamaño de estos animales es variable; las más pequeñas son las ardillas pigmeas africanas, que miden unos 13 cm de longitud, y las más grandes son las ardillas gigantes de Asia, que miden cerca de 90 cm de largo. Las ardillas están distribuidas por todo el mundo, excepto Australia. Suelen vivir en bosques caducifolios o de coníferas, aunque es posible encontrar especies adaptadas a vivir en hábitats muy distintos, desde la zona boscosa al desierto o zona de poca o nula vegetación.
Son animales muy activos,, sumamente rápido y ágiles. Esto es debido a las uñas que tiene en sus dedos, que permiten una buena sujeción a los árboles. Al descender de un árbol, siempre lo hace cabeza abajo. La movilidad que tiene en sus patas delanteras le permite sujetar y pelar los alimentos con gran facilidad.

Descripción de las ardillas

     
Ardilla, nombre común que se aplica a determinadas especies de roedores que pertenecen a una familia que comprende a las ardillas arborícolas, las ardillas terrestres, las marmotas, las ardillas listadas, las ardillas voladoras o planeadoras y los perritos de las praderas. Dentro del grupo de las ardillas arborícolas y las terrestres se incluyen unas 230 especies y en el grupo de las ardillas voladoras se incluyen unas 43 especies. El tamaño de estos animales es variable; las más pequeñas son las ardillas pigmeas africanas, que miden unos 13 cm de longitud, y las más grandes son las ardillas gigantes de Asia, que miden cerca de 90 cm de largo. Las ardillas están distribuidas por todo el mundo, excepto Australia. Suelen vivir en bosques caducifolios o de coníferas, aunque es posible encontrar especies adaptadas a vivir en hábitats muy distintos, desde la zona boscosa al desierto o zona de poca o nula vegetación. Para vivir en estos lugares, las ardillas han sufrido adaptaciones y han desarrollado estrategias que les permiten soportar las temperaturas extremas que las caracteriza
Animal de aspecto muy simpático, la raza más frecuente es la Ardilla de Corea, de dorso listado en tonos marrones. La Ardilla Roja de América, además de ser el más pe­queño de esta vasta familia, es quizá el más gracioso. La Ardilla Gris se ha habituado a vivir en las localidades urbanas.
Fundamentalmente diurnas, tienen muy buen olfato, oído y vista, y distinguen bastante bien los colores

Caracteristicas


      Su cuerpo es esbelto
      Larga cola peluda
      Cabeza avispada
      Ojos brillantes 
      Dientes agudos y afilados.

Alojamiento


Son animales muy activos,, sumamente rápido y ágiles. Esto es debido a las uñas que tiene en sus dedos, que permiten una buena sujeción a los árboles. Al descender de un árbol, siempre lo hace cabeza abajo. La movilidad que tiene en sus patas delanteras le permite sujetar y pelar los alimentos con gran facilidad
El nido que construyen estos animales son de suma importancia. Suele tener más de uno en su territorio, que suele ser entre 200 y 300 metros
La ardilla silvestre cambia a menudo de albergue para evitar las visitas de                                                                                                                    zorras y otros  animales, cualquier nido abandonado por el día, un nido en                                                               condiciones por la noche y un agujero de árbol para el largo sueño invernal.
Las ardillas también suelen tener pequeños almacenes para esconder una ración de comida suficiente para un día. Y otros muchos mayores, que en otoño se llenan con una cantidad de víveres suficiente para dejar transcurrir sin preocupa­ciones el invierno y los primeros meses de la primavera.

Alimentacion

      En estado salvaje, las Ardillas no son muy exigentes. Se comen todo lo que pueden roer con sus dientes: nueces, piñones, bellotas, bayas, avellanas, cacahuetes...También comen brotes, fruta e incluso insectos.
      Para las ardillas domésticas, lo mejor es recurrir a un alimento especialmente formulado, que completaremos con frutos y semillas.
      El agua es un factor que condiciona su existencia como especie, por lo que necesita vivir cerca de lugares con presencia continua de agua como pueden ser los ríos, manantiales, arroyos

Enfermedades

      Uno de sus principales problemas es la falta de calcio, que se soluciona dándoles una correcta alimentación con el aporte necesario de este mineral y de la vitamina D imprescindible para su asimilación.
      La viruela de ardilla, también conocido como fibroma ardilla, hace que el crecimiento de tumores en la epidermis de la ardilla. Se transmite de forma viral, por lo general a través de mosquitos o de ardilla a ardilla.
      Las ardillas jóvenes son los más vulnerables. Los tumores pueden producir metástasis en los tumores más graves que afectan a los órganos internos. las ardillas que desarrollan la enfermedad metabólica del hueso está sufriendo de una mala alimentación, sobre todo la deficiencia de vitamina D o la falta de luz. MBD es común en las ardillas en cautiverio que no está recibiendo suficiente luz natural. Puede ser compensada por proporcionar a los animales con al menos 20 minutos de luz solar directa por día o, si ello no es factible, utilizando todo el espectro de las bombillas. Los síntomas incluyen letargo y dolor. Conoce  ninguna cura para la viruela ardilla

Reproducción y Cria

En la naturaleza hemos visto que el periodo de celo coincide con el despertar del letargo invernal, que se produce en el mes de marzo. Para los animales que viven en una casa, y que por tanto no entran en un letargo tan profundo, el celo comienza en diciembre y dura hasta finales de marzo. Durante este periodo los animales sufren transformaciones físicas y de comportamiento:
- En la hembra se produce la congestión y edema de la vulva, un aumento del estado de agitación, con emisión, a intervalos de unos 10 segundos, de un silbido agudo de reclamo y emisión de pequeñas cantidades de orina por todo el territorio
- En el macho se observa un aumento del tamaño de los testículos, midiendo unos 1,5 cms. Las hembras entran en celo cada dos semanas y están receptivas un día, o a veces hasta tres. Los machos por el contrario, están siempre disponibles para la copulación.
El acto de la copulación se produce después de un ritual determinado: La hembra huye cuando ve al macho emitiendo unos agudos silbidos de reclamo. Durante la fuga también emite una pequeña cantidad de orina, que casi llega a dejar un rastro oloroso. Después de una serie de pequeñas riñas, la hembra se decide a aceptar al macho, y se queda inmóvil con la cola levantada verticalmente. Ésta es la señal para el macho, que monta en su espalda para fecundarla repetidamente.
La gestación dura una media de 29 a 32 días, durante los cuales la hembra se dedica a la preparación del parto: Rellena cuidadosamente el nido, come mucho, reúne una gran cantidad de reserva de alimento que almacena en el nido y, por último, inspecciona muy bien la jaula para comprobar que puede acoger a sus pequeños.
La alimentación y la tranquilidad juegan un papel muy importante. Por lo que respecta al acomida, debemos procurar, ahora más que nunca, darle alimentos lo más variados posible y de alto contenido vitamínico. El calcio y las sales minerales tienen también una gran importancia, sobre todo para el desarrollo de los fetos.
Durante el embarazo y la lactancia al hembra le gusta beber leche , que puede ser artificial, de vaca, o bien condensada, pero debe diluirse siempre con agua. Para que sea la ardilla quien decida el tipo de leche que prefiere y digiere con más facilidad, hay que efectuar unas pruebas, en el curso de las cuales habrá que observar los excrementos: Si son diarreicos , significa que la leche es poco digerible.
En lo concerniente a la tranquilidad, es necesario que la ardilla se sienta segura de que allí podrá crear a sus pequeños sin problemas. No se debe cambiar de lugar ni la jaula ni el nido, y hay que eliminar toda fuente de ruido; por nuestra parte deberemos contener nuestra curiosidad natural.